El San José cumplió el expediente ante un desahuciado Camas y se llevó una victoria clara y contundente del Isidro Reguera, ante un voluntarioso equipo local, en el que destacaba Pipi, pero que tenía demasiadas carencias para frenar a un cuadro cañamero que, sabedor de lo que se jugaba, no iba a permitir ninguna sorpresa negativa.

Desde el inicio, Josito Hernández, que vio el partido desde la grada tras ser expulsado ante el Ventippo, estuvo muy activo, precisamente para que no hubiera ningún tipo de relajación.

Desde el inicio, los azulinos miraron a la portería de Manu y ya en el minuto 5 se adelantaron en el marcador por medio de Luis Cubero, el primero de los tres que anotó en el partido para irse a una docena de dianas, superar a Kisko y colocarse como Pichichi del San José.

El Camas se esforzaba. Trata de tocar la pelota, de salir al contraataque y asomarse a los dominios de Iván, que volvía al arco cañamero, pero que no tuvo trabajo en toda la primera parte. En la salida de balón, en las coberturas, en las marcas… los cameros tenían graves lagunas y los cañameros lo aprovechaban. En un balón suelto en el área en el 16, Said controló de espaldas, se giró y batió a Manu de tiro raso. Entre uno y otro gol hubo más ocasiones, quedando la sensación de que el San José podría marcar cuantos goles quisiera.

En el 27 Luis Cubero anotaba el tercero y el segundo de su cuenta particular y, en el 44, marcaba el cuarto y confirmaba su hat trick, resultado con el que se llegó al descanso.

La segunda parte comenzó con la misma intensidad del San José. Hubo arenga del entrenador en el vestuario. Josito pidió a sus hombres “disfrutar” y no bajar el pie del acelerador, lo que, por otro lado, es el mayor gesto de respeto hacia un rival que hace semanas que entregó la cuchara. En una combinación entre los locales, que hilvanaron tres buenos pases, Pipi se quedó solo en la frontal y fue derribado por Alemán. Chacartegui Portillo señaló la falta y le sacó la roja directa al pivote cañamero. Era el minuto 53 y, ante la falta de argumentos del Camas y la inferioridad azulina, lo que provocó la expulsión fue que se afeara el espectáculo.

Aun así, cuatro minutos más tarde, Mimi estrenó su cuenta goleadora esta campaña, para cerrar el marcador y poner el 0-5. Y, desde entonces, poco más que contar. El Camas, un quiero y no puedo, y el San José que no quiso arriesgar más. Y los dos equipos locos porque llegara el final. De hecho, el colegiado pitó el final cuando en el electrónico del Isidro Reguera aparecía el minuto 44.

El próximo partido, sin Alemán y sin Manu Gallardo, que vio la quinta amarilla, será en el Felipe del Valle ante el Algabeño. Será el domingo 23, por lo que tiene tiempo de prepararlo a concidencia.