Las conclusiones definitivas deberán esperar al estudio de laboratorio, tanto de la documentación obtenida como de los restos materiales, que se llevarán a cabo entre otoño de 2021 y primavera de 2022 en las instalaciones del Museo Arqueológico y Paleontológico de La Rinconada y el laboratorio del Departamento de Prehistoria y Arqueología de la Universidad de Sevilla
El Proyecto General de Investigación ‘Cerro Macareno’, dirigido desde la Universidad de Sevilla, que cuenta con la colaboración del Ayuntamiento de La Rinconada y el Museo de La Rinconada, ha llevado a cabo una nueva campaña de estudios arqueológicos sobre este yacimiento. En este caso se trataba de la tercera fase del proyecto, que no pudo realizarse durante el año 2020, debido a la situación de pandemia.
Durante esta campaña se han continuado con las excavaciones en la elevación oriental (cerro grande), iniciadas en la campaña de 2018, y que tienen como objetivo estudiar las últimas fases de ocupación -y el abandono- del primitivo asentamiento a inicios del periodo romano, en torno al año 100 a.C. Los interesantes resultados de las campañas anteriores han ampliado el área de excavación de los 75 m2 abiertos inicialmente, a 200 m2.
“Los resultados obtenidos han superado esas expectativas. Por un lado, se ha podido documentar con mayor detalle los contextos de finales del siglo II a.C. y muy especialmente un posible taller de producción de vidrio que, de confirmarse, sería probablemente el más antiguo de la Península Ibérica. Están asociados a nuevos elementos constructivos de carácter doméstico (muros, pavimentos, niveles de ocupación de tierra batida) y a contextos materiales de gran interés (ánforas, cerámicas de almacenamiento, servicio y cocina, etc.), ya que permiten profundizar no sólo en las formas de vida de sus habitantes y los cambios operados en las poblaciones locales en los momentos iniciales de la presencia romana en la región, sino también trazar un retrato robot del tráfico comercial con otras áreas del sur de la Península Ibérica y del Mediterráneo central y occidental a través de las importaciones registradas”, explica el director del proyecto y profesor del Departamento de Prehistoria y Arqueología de la Universidad de Sevilla, Francisco José García Fernández.
Otro de los hallazgos especialmente relevantes, como señala García Fernández, ha sido el descubrimiento de un nivel de ocupación de cronología medieval que se superponía parcialmente a los restos abandonados de la última fase del opidum turdetano, aprovechando el material constructivo (mampuestos y cantos rodados sobre todo), de las estructuras de finales del siglo II a.C. “A la espera de conocer con mayor precisión su cronología, se trataría de una evidencia de la ocupación humana en la zona de La Rinconada previa a la fundación del hospital de campaña por el rey Fernando III, lo que supondría un antecedente a los orígenes históricos de la localidad”.
Por último, conjuntamente con el Museo Arqueológico y Paleontológico de La Rinconada, que coordina todas las tareas de difusión y activación social del yacimiento, durante las excavaciones se programaron distintas iniciativas destinadas a acercar el yacimiento y su historia al público, especialmente visitas a grupos de estudiantes y de adultos de adultos.
La delegada de Cultura, Raquel Vega, destaca que "el Ayuntamiento y el Museo de La Rinconada están trabajando para que Cerro Macareno sea declarado Bien de Interés Cultural, lo que le otorga al yacimiento el nivel más alto de protección y abre oportunidades para divulgar su valor científico. A medio plazo, nos marcamos, asesorados por la Universidad de Sevilla, un atractivo proyecto de recuperación del patrimonio que nos permitirá recrear nuestro pasado remoto, con especial atención a la presencia tartésica, turdetana y romana en Cerro Macareno".